Colombeia

Pero acometido de los perros de Diana y por los suyos propios, perdió el infeliz la vida entre los dientes de estos animales, cuya transformación hizo Diana, arrojándoles agua en la cara. Sirenas eran unos monstruos marinos con semblante de mujer y lo restante de ave, llamadas Parténope, Ligea y Leucosia; adormecían con su canto a los navegantes, atrayéndolos a la orilla, se los comían, de lo que se libertó Ulises haciéndose atar al árbol del navío y ellas se precipitaron al mar. El néctar es el licor que bebían las diosas y que servía, junto con la ambrosía, para conservar siempre la juventud por más años que uno viviese. Fuente de la Fama Volviendo desde dicha plazuela al Real Palacio, por la calle que llaman de Balsain, al comedio de ella, sirve de testero a un hermoso parterre, la soberbia fuente de la Fama. Consiste ésta en un estanque de figura ovalada, que su mayor diámetro consta de 16 toesas, 3 pies y dos pulgadas