Habiendo Muley Boudely, último Rey Moro de Granada, entregado las llaves de di-cha Ciudad, el viernes 2 de enero de 1492, a las 3 de la tarde en la puerta de la Alambra a Nuestro Católicos Monarcas Don Fernando V de Aragón y Doña Ysabel de Castilla, des-pués de 777 años que esta Ciudad sufría el yugo Mahometano, desde la pérdida de España; acaecida el domingo 11 de noviembre de 740. Salió dicho Católico Rey a despedir a Bou-dely hasta éste, si no antes Mezquita de Moros y entonces erigida Ermita de San Sebastián, donde dieron las primeras gracias a Dios nuestro señor el glorioso Conquistador y su Ejér-cito, entonando la Real Capilla el Te Deum, y tremolando en la Torre de la Vela el Estan-darte de la Fe, en cuya memoria se toca a dicha hora la plegaria en la Catedral y se gana Indulgencia plenaria rezando tres Padres Nuestros y tres Aves Marías.
Habiendo Muley Boudely, último Rey Moro de Granada, entregado las llaves de dicha Ciudad, el viernes 2 de enero de 1492, a las 3 de la tarde en la puerta de la Alambra a Nuestro Católicos Monarcas, Don Fernando V de Aragón y Doña Ysabel de Castilla, después de 777 años que esta Ciudad sufría el yugo Mahometano, desde la pérdida de España, acaecida el domingo 11 de noviembre de 740. Salió dicho Católico Rey a despedir a Boudely hasta éste, sino antes Mezquita de Moros y entonces erigida Ermita de San Sebastián, donde dieron las primeras gracias a Dios nuestro señor el glorioso Conquistador y su Ejército, entonando la Real Capilla el Te Deum, y tremolando en la Torre de la Vela el Estandarte de la Fe, en cuya memoria se toca a dicha hora la plegaria en la Catedral y se gana Indulgencia plenaria rezando tres Padres Nuestros y tres Aves Marías.