Mayo, 21.
Terminada nuestra conferencia tan pacífica y amigablemente como habréis observado, resta sólo la cooperación por vuestra parte para asegurar que corresponderán sus efectos con nuestras plausibles esperanzas. Mañana ó pasado se pondrá en marcha el ciudadano Antonio Fernández de León, director de nuestro Erario público, llevando consigo las correspondientes credenciales é instrucciones, esperando que no sólo le animará ese gobierno a su presentación, sino que contribuirá é inflamará al de Caracas a la realización de un objeto en que está depositada mucha parte de nuestra prosperidad. Celebraré os restablezcáis de vuestros achaques, y que dispongáis de vuestro affmo amigo, etc.