24 de mayo de 1812.
Mi querido Espejo:
D. Antonio Fernández de León va a Caracas, a encargarse, como Vd. Sabe, del departamento de Rentas nacionales; yo espero que Vd. Cooperará con su influjo a la organización de tan importante ramo, como que de su arreglo depende, en mi concepto, lo más esencial de nuestra regeneración.