Colombeia

Vriarte (que de tierra pasó a bordo del Sn Luis por la mañana) al Cuter Serpent para pasar a Tierra y conferenciar con el General Galbes, lo que fuese mas combeniente al cumplimiento de su Comisión No habiéndose embiado mas de un Practico al Navio Sn Luis resolbimos tomar de paso el que tubiese la fragata Andromaca para entrar en el Puerto, pero haviendo encontrado la fragata, nos dijo, que Vgarte el Mayr de Solano, se ha vi a llevado el Practico la noche antecedente, para entrar en el Puerto al Bergantín la Lebrete, en que dijimos antes, se havia embarcado, y haviendonos afloxado demasiado el viento, no pudimos agarrar el Puerto. A cosa de las 8 nos hallamos empeñados sobre la Costa de la Isla de Sta Rosa, y sin conocimiento del parage, por lo cual dimos fondo inmediatamente… Quedamonos por consecuencia a Bordo, haviendo recivido el mejor trato del Thente de Navio Mr. La Lonne, comandante de dha Embarcación, cuio carácter Amable Y Generoso: le distingue generalmente— Durante la noche tiramos barios Cañonazos, y Cohetes, a fin de que oyesen estas Señales, o vien Ntro Destacamento de la Isla de Sta Rosa, o las fragatas que estaban en el Puerto, y nos embiasen un practico, pero resultó, estábamos demasiado distantes, y no nos oyeron. A las 8 de la mañana lebamos el Ancla, y nos pusimos a la vela en demanda de la punta de siguenza de Dha Isla, navegando con viento mui floxo 21… 22. de S E y a las 21/2 d. t. nos hallamos sobre dha Punta a la entrada de el Puerto, frente de las Barrancas—coloradas donde tienen los Enemigos, su batería llamada the redclipts— Aquí llegó a nuestro bordo un Bote de la Plaza, en que benia el Teniente de Navio Villavicencio, y dirigiéndonos lo mejor que pudo, según los conocimientos que tenia de ia entrada, bien que no sin tocar en la Barra: al paso por delante de dhas Baterías nos tiraron los Enemigos 14 Cañonazos de grueso calibre, y bien dirigidos; por casualidad ninguno tocó la Embarcacion… dos Razones tenemos, sin embargo, que considerar para que este
Uriarte —que de tierra pasó a bordo del San Luis por la mañana— al cúter "Serpent", para pasar a tierra y conferenciar con el general Gálvez lo que fuese más conveniente para el cumplimiento de su misión. No habiéndose enviado al navío San Luis más que un práctico, resolvimos tomar de paso el que tuviese la fragata "Andrómaca" para entrar en el puerto, pero, habiendo encontrado la fragata, nos dijeron que Ugarte, el Mayor de Solano, se había llevado el práctico la noche antecedente para hacer entrar en el puerto el bergantín la "Lebrete" en la que se había embarcado, como dijimos antes. Y como el viento había aflojado demasiado, no pudimos agarrar el puerto. A cosa de las ocho nos hallamos empeñados sobre la costa de la Isla de Santa Rosa, sin ningún conocimiento del paraje, por lo que dimos fondo inmediatamente, y nos quedamos en consecuencia a bordo, habiendo recibido el mejor trato del teniente de navío Mr. La Lonne, comandante de dicha embarcación, cuyo carácter amable y generoso lo distingue generalmente. Durante la noche tiramos varios cañonazos y cohetes, a fin de que oyesen estas señales, o bien nuestro destacamento de la isla de Santa Rosa, o las fragatas que estaban en el puerto, y nos enviasen un práctico. Pero resultó que estábamos demasiado distantes y no nos oyeron. A las ocho de la mañana levamos el ancla y nos pusimos a la vela en demanda de la Punta de Sigüenza de dicha isla, navegando con viento muy flojo. 21, 22 de abril.— De S.E. y a las 21/2 de la tarde, nos hallamos sobre dicha punta a la entrada del puerto, frente a las Barrancas Coloradas, donde los enemigos tienen su batería llamada "the Redcliffs". Aquí llegó a nuestro bordo un bote de la Plaza en el que venía el Teniente de Navío Villavicencio, dirigiéndonos lo mejor que pudo, según los conocimientos que tenía de la entrada, bien que no sin tocar en la barra. Al pasar por delante de dichas baterías, los enemigos nos tiraron 14 cañonazos de grueso calibre y bien dirigidos, que por casualidad no tocaron la embarcación. Tenemos, sin embargo, que considerar dos razones para que este