Colombeia

atacaron por la brecha. 8.000 moros de Quibdana y Botoya, y arrimando siete escalas, dieron dos asaltos, pero se vieron obligados a retirarse por el mucho fuego artificial que arrojaban los sitiados, por disposición del alférez D. José Villajuana, que mandaba los 50 hombres naturales de la Plaza y desterrados que guarnecían aquel fuerte. Siguió el sitio el año de 1716 que gobernó la Plaza interinamente el brigadier ingeniero D. Pedro Sansón, al que mudó en propiedad el mariscal de campo D. Pedro de Borras, quien defendió el fuerte de dos vigorosos avances, que le dieron 8.000 moros los días 8 y 11 de febrero, en los que llegaron a jugar las armas blancas. Pero pegando fuego a las fogatas u hornillos, hizo volar más de 3.000 moros de que amedrentados levantaron el sitio, mandando el fuerte el Alférez D. Jacinto del Campo. Y finalmente, aunque los moros levantaron sus sitios, y no los han intentado desde 1727 en que murió MuleyIsmael, han tenido muchos años después hasta el de 1733, sus ataques formados, ocupando todo el fuerte de la Plaza y altura del Cubo, que para demolerlos han costado mucha sangre en varias salidas que se hicieron a este fin; y no obstante, después hasta hoy, tienen diferentes apostaderos en los fuertes destacados que perdimos