Caracas, 15 de julio de 1812.
Mi general: Siento infinitamente decir á Vd. Que aun todavía me hallo en Caracas, a pesar del interés que Vd. Manifestó á mi despedida para que me embarcase á la mayor brevedad. Ayer me presenté al director, luego que llegó de ese cuartel general, y no he podido lograr que habilite mi expedición.
La misión al Norte me parece hoy más importante que nunca; los momentos son críticos y nuestra salvación depende de preverlo todo en tiempo y solicitar remedios por todas partes. M. Scott me ha informado de la buena disposición en que se halla el gobierno americano con respecto á nosotros, y á mi ver sería ventajosísimo que yo me viese con él, mucho más antes que el Congreso se ponga en receso. Suplico á Vd. Encarecidamente se sirva prevenir al director no me detenga más aquí. Desearía que Vd. Me contestase por 'lo que mira á Mr. Burke, repito á Vd. Que este hombre á mi lado puede hacer importantes servicios á este país y puede auxiliarme muy mucho con sus luces.
Saluda á Vd. Con el mayor respeto:
Su seguro servidor
Q. B. S. M.
Pedro Gual.