Caracas, mayo 7 de 1812.
Venerado general: Mi hermano no ha podido sufrir la permanencia aquí con su compañero en campaña, y fomentando su honrosa inclinación, me tomo la libertad de suplicar á Vd. Lo ponga en el número de sus ayudantes de campo.
Cuando juzgue á Vd. Más desocupado, le diré algo sobre el pormenor de las cosas, en inteligencia que sólo ansia los triunfos de ese ejército su seguro servidor y subdito:
F. Carabaño.