Colombeia

je ne pourrais me réalizer aujourd'hui pour toute fortune que cent cinquante portugaises. j'atend actuelement 6000 volumes qui me sont annoncés, mais je suis furieusement dégouté de S. Domingue et si j'avais de ees talens a réussir partout pais, j'irais essayer de la Havane. venons un peu á vos livres qui sont chez M. de Galves, je les ai demandes et au General et á M. de la Paz, ils me les prometent, je les atend encoré, je suis malade depuis 3 semaines sans ce je serais alé tous les jours au haut du Cap, peut etre eut on cede á mes importunités. un jeune home rempli de talents pour son état, c'est á diré bon dentiste, vous ne le devineriéz pas sur mon debut, un jeune home disje sur le refus de M. Leroi qui demande toujours cent portugaises d'avance, se decide á faire le voyage de la Havane pour un mois je l'ai harcelé parce que vous desirez un artiste dans ce genre. je vous pricrai de lui acorder votre protection. il desirerait emporter une petite pacotille, mais ne sachant ce qui est de débit dans votre ile, je vous prierai de me le marquez et de m'indiquer la rubrique. Mon Cousin a demandé sa démission, je l'ai fait passer en franee, il avait eté compromis dans la merae afaire que moi, si je n'avais pas vu de l'acharnement de la part de certains chefs envers ma persone, je lui aurais conseille de rester, touts les officiers d'aughieux avec les quels ils logeaient, etaient témoins qu'il était malade depuis 3 jours et que ce soir il était couché depuis huit heures et demie, mais averti par certaines persones de mes amis je n'ai pas jugé á propos
Hoy no podría contar sino con 150 portuguesas por toda fortuna. Espero actualmente seis mil volúmenes que me han anunciado, pero estoy furiosamente asqueado de Santo Domingo y si tuviera el talento para obtener éxito en todos los países, iría a probar en La Habana. Volvamos un poco a sus libros que están casa del señor Gálvez. Se los pedí al General y al señor de la Paz, me los prometen y sigo esperándolos. Hace tres semanas que estoy enfermo, de lo contrario hubiera ido todos los días a lo alto de Cabo, quizás hubieran cedido ante mi insistencia. Un joven lleno de talento en su profesión, es decir, buen dentista, V. no lo hubiese adivinado al principio, un joven, digo, ante la negativa del Sr. Le Roi, que sigue pidiendo cien portuguesas por adelantado, se decide a hacer el viaje a La Habana por un mes. Lo he acosado porque V. desea un artista en ese género, le ruego le conceda su protección. Desearía llevarse una pequeña pacotilla, pero no sabiendo lo que hay en su Isla le ruego me lo diga y me indique la lista. Mi primo ha solicitado su dimisión, lo he hecho pasar a Francia, estaba comprometido en el mismo asunto que yo, y si no hubiera visto el ensañamiento por parte de ciertos jefes hacia mi persona, le hubiera aconsejado quedarse. Todos los oficiales con los que vivía, eran testigos que estaba enfermo desde hace tres días y que esa noche se había acostado a las ocho y media, pero prevenido por ciertas personas amigas mías, no he juzgado bueno que