o conductores es de que el comandante Inglés conduzca por su autoridad los asuntos desde nuestro desembarco en el Continente hasta que se tome la ciudad de Caracas y formemos un Gobierno, cuyos magistrados puedan entonces (y no antes) tomar el mando, etc... hasta cuya época el Comandante Inglés había de mandarlo todo con la ayuda y consejo del señor de Ma. A esto yo he respuesto (sic) que ni por un minuto consentiría yo que una Fuerza Extranjera ejercitase ninguna autoridad ni tomase el tono de Conquistador en el País y que bajo el Estandarte Americano solamente serviría yo o convidaría mis compatriotas a reunirse, etc..
Me dijo también que Vansittart le había asegurado que todo marchaba a la ejecución y que me pedía que mañana a las 8p.m. me hallase en su casa, en Stone Buildings, para tratar el asunto definitivamente junto con Rutherfurd, etc.
29 de julio
Cuando nos preparábamos para esta importante conferencia, cata aquí que recibo la nota (n°12) del señor Vansittart remitiendo nuestra conferencia a mañana. Tal vez titubean aún estas gentes indecisas y tímidas.
30 de julio
Aguardando con ansia la hora de nuestra reunión, vea V. que recibo aún la nota (n° 13) de Vansittart, posponiendo aún nuestra conferencia a mañana a la misma hora. ¡Es cosa singular la timidez e indecisión de estas gentes! En fin vino Rutherfurd y me dijo que debían reunirse hoy Nepean, Sullivan y Vansittart para convenir de todo lo que fuese necesario antes de nuestra conferencia y que este era únicamente el motivo del retardo. Efectivamente, a eso de las 8 p.m. recibí la nota (n°14) del señor Sullivan convidándome a venir mañana a comer con el Ministro de la Guerra para tratar de estos asuntos… ¡Dios quiera que el resultado sea decisivo o de cualquier manera que se pueda ajustar!