Instrucción de Dumouriez a los Generales
En cuanto entre en el territorio de Bélgica, el General hará fijar en carteles el manifiesto que le he enviado, poniéndolo en conocimiento del pueblo.
En cuanto entre en una de las ciudades de Bélgica, reunirá en la plaza pública a todo el pueblo y le declarará en nombre de la República Francesa, que no solamente el pueblo está libre y desembarazado de la esclavitud de la casa de Austria, sino que por el derecho imprescriptible de la naturaleza, es él, el pueblo, quien es soberano y que nadie tiene autoridad sobre él, si no es él mismo quien delegue parte de su soberanía; en consecuencia, le anunciará que para poder tratar de sus intereses con los generales del ejército de la República Francesa, debe comenzar por elegir en el acto sus Magistrados y administradores por la vía del escrutinio y enviar las mismas órdenes a todos los burgos y pueblos que le incumban.
El General anunciará al mismo tiempo al pueblo que ni la República Francesa, ni los generales que comandan los ejércitos, darán órdenes ni influirán en la forma de gobierno