Colombeia

conmigo y con esta desdichada empresa! 26 de agosto Díjome Vargas que había conocido mucha gente en casa de Turnbull ayer y que este se iba hoy. Poco después llegó el mismo en persona, que desviándose una milla de su camino ha venido a abrazarme y con las lágrimas en los ojos, cosa que me ha enternecido y hace amarlo más y más, en medio de los disparates que de cuando en cuando me hace en asuntos políticos, etc. Vino Rutherfurd por la tarde y me dijo que creía en la marcha segura de nuestra expedición por haber encontrado un Comisario de su conocimiento en casa de Vansittart que se lo dio a entender. Dios quiera que sea verdad. 27 de agosto Rutherfurd ha visto a Vansittart que le dijo me dijese muchas cosas de su parte y que mañana sin falta vería a Sullivan para que se hiciesen (si no estaban ya preparadas) las espadas cortas a la Romana, que yo tengo pedidas y muy recomendado a Rutherfurd. Me envió con el mismo las últimas Gacetas de Francia, que me han hecho ver con cuánta facilidad pueden los franceses enviar fuerzas que nos contraríen nuestros designios en aquellos parajes... y sin embargo me dice Ruth, que Vansitt decía que no temía que los franceses penetraran nuestros designios pues que Milord S.V. le aseguraba que podía impedir que enviasen fuerzas a aquel Continente. ¡Habrase visto tal seguridad! Me dijo también Ruth, que estuviese seguro de que no enviarían en la expedición ninguna persona que yo desaprobase, pues que así lo había comprendido de varias conversaciones que Sullivan había tenido relativas a estos asuntos. ¡Quiera la Providencia que así sea! 28 de agosto Las Gacetas me han dado hoy tan mal humor que he escrito a Vansittart la nota (n° 24) haciéndole ver las fatales